El trabajo del artista se se convierte también en un recorrido de búsqueda, en el que intento llegar a la esencia de las cosas y que, de manera más profunda, le permitirá vincularse a sus raíces y a su origen (geografía). Es un divagar entre las formas de la naturaleza y nuestra naturaleza creada (rodados de piedra y geometrías pétreas), pretexto para mostrarnos el espíritu, lo inmaterial, lo permanente”.
Citando a Constantin Brancusi, “Mi obra está dirigida sobre todo hacia el realismo. Busco la realidad interna y escondida, la esencia interior de las cosas, en su naturaleza perenne”, indica Mauricio Guajardo